Hotel Santa Isabel

Justo frente a la emblemática Plaza de Armas –plaza adoquinada otrora escenario militar de la etapa colonial, rodeada de edificios, museos y restaurantes– se levanta este lujoso hotel de ambiente palaciego bautizado Santa Isabel.  La instalación, de tres pisos y con 27 habitaciones, goza de una excelente ubicación en el mismo corazón del Casco Histórico de la Habana antigua, como punto referente hacia otros lugares de interés histórico, turístico y cultural, a solo una cuadra de la Avenida del Puerto y del Malecón que serpentean la célebre Bahía habanera. Exactamente en la calle Baratillo,  número 9 entre Obispo y Narciso López, es una instalación de lujo con un tono formal de clase alta, rico en historia y encanto colonial.

Su suite ha acogido a figuras de renombre internacional, nombrados huéspedes ilustres, como los norteamericanos: el actor Jack Nicholson, el expresidente Jinmy Carter y el cantante Sting.

Uno de sus mayores encantos, además de contar con la exquisitez de los demás hoteles de la cadena Habaguanex, es la amplia terraza hacia la Plaza de Armas, característica de algunas de sus habitaciones del ala oeste. Espacio desde donde se puede disfrutar de una refrescante brisa, o tomar el sol del Trópico, disfrutar de música grabada; y lugar histórico pues por allá por el lejano 1830 despegó desde allí un globo aerostático cargado de flores dedicado a la princesa María Isabel Luisa.

La fachada del Santa Isabel es amplia y combina con el fabuloso lobby climatizado con hermosas lámparas de cristal, espléndidos sofás tapizados y un exquisito mobiliario de época, propios de los tiempos en que fuera propiedad del Conde de Santovenia, miembro de la nobleza cubana del siglo XIX.

Para degustar de los mejores platos, muy cerca del lobby, se encuentra el refinado  restaurante El Condado, amueblado con piezas antiguas, realzando la elegancia que prima en toda la instalación. 

Otra opción menos formal, más relajada, la ofrece el patio español junto al lobby. Lugar ideal para leer o disfrutar de un coctel en una de las mesas dispuestas alrededor de la fuente central.